Actualmente, las parejas suelen formarse a partir de una emoción que es el enamoramiento.
El objetivo principal de la pareja es hacerse la vida agradable pero la emoción del enamoramiento puede ser pasajera y es necesaria para la continuidad positiva de la pareja una base de intimidad, compromiso, entrega, comunicación, resolución de conflictos y apoyo mutuo para llevar la relación de una manera agradable y sana.
La pareja puede ser una fuente de bienestar o convertirse en una fuente de conflictos y malestar, si no se trata en el momento adecuado.
Podríamos agrupar los conflictos que normalmente suelen tratarse en terapia de pareja, los más frecuentes suelen ser por:
- el poder y las responsabilidades
- la pasión y la sexualidad
- la intimidad
- la diferenciación con la familia de origen
- la comunicación
También generan conflictos los cambios a nivel vital como:
- las enfermedades
- los problemas económicos
- la paternidad o maternidad
- la independización de los hijos
- la jubilación
- etc
La forma de terapia de pareja es básicamente cognitivo-conductual y sistémica, terapias con evidencia probada de eficacia, el tratamiento suele consistir - básicamente en:
- entrenamiento en habilidades de comunicación y resolución de conflictos
- aumentar los intercambios de conductas positivas
- introducir cambios en las expectativas
- atribuciones e ideas irracionales
- cambiar el patrón de reciprocidad negativa introduciendo conductas positivas